Gran Cañón, 10 de junio 2015

Todos los días debemos agradecer por la vida que llevamos, por las bendiciones que recibimos y por todo lo que tenemos, familia, trabajo, hogar, personas que nos aman y a las que amamos. Seguro que como me pasa a mi, hay días en que no lo hacemos, no nos damos cuenta de lo que tenemos. Pero hay días como el de hoy en el que es imposible no hacerlo. Son tantas las maravillas que puedes ver, sean estas hechas por la mano de Dios o por el hombre. Me siento muy bendecido y estoy agradecido con Dios y con la vida. Hacer lo que hago, ver lo que veo, disfrutar de tanta belleza a veces me hace pensar en que debe haber una razón para esto, aun no se que cual es, pero espero saberlo. Días como los de hoy es cuando mas extraño a mi familia, las personas con las que me gustaría disfrutar de estas bendiciones. No es mi primera visita a Las Vegas o al Gran Cañón, pero no dejo de sorprenderme con todo esto.

Muy temprano, a las 5,30 de la mañana ya estábamos en el autobús que nos llevaría hasta el aeropuerto de Helicópteros Mavericks en Henderson. Esta es una de las empresas que haces vuelos turísticos sobre Las Vegas y su alrededores. Nosotros hemos tomado el vuelo al Gran Cañón del Colorado. Si hay algo que hay que reconocerle a los norteamericanos es la organización y masificación que han hecho del turismo. Las Vegas y muchas otras ciudades son una muestra. Tiene todas las facilidades para los visitantes, hoteles a todos los niveles, desde una salida en bicicleta hasta vuelos en helicóptero y pronto en naves espaciales, es solo cuestión de tiempo.

Que sean las fotos las que hablen hoy.